¿Y si te pagaran el trabajo que haces en tu hogar?

Seis, ocho, doce horas o más de trabajo, de acuerdo con las condiciones laborales de los colombianos, son más que suficientes al momento de finalizar una jornada y regresar al hogar para descansar y recuperar la energía necesaria para un nuevo día.

Sin embargo, solo una parte reducida de la población trabajadora del país tiene el privilegio de llegar a sus hogares para descansar o dispersar su mente en diferentes actividades. Ese es el caso, por ejemplo, del  56,8% de la población trabajadora, equivalente a la cifra de mujeres trabajadoras en el país según en DANE, quienes deben desempeñar funciones adicionales en el hogar, sin remuneración o reconocimiento alguno. La cifra, sumada a las estadísticas no tan conocidas como el número de abuelas dedicadas al hogar, tías, amigas y otras “obsequiadoras de tiempo”, como se les cataloga a quienes no tienen retribución por su labor en el hogar, ha motivado a diferentes organizaciones a cuestionarse sobre el valor que representa este trabajo. Las conclusiones a las que llegaron entidades como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, por ejemplo, arrojaron que, de ser remunerado ese trabajo en el hogar, equivaldría a cerca del 53% del Producto Interno Bruto del País y, además de la valoración económica, evidencia el mal reparto de las cargas en el hogar. Pero para entenderlo mejor y no alarmarse con amplias cuantías estatales, acercamientos más próximos y revelados por reconocidos medios de comunicación como The Huffington Post,  permiten evidenciar lo valioso que resulta el tiempo que se desempeña en el hogar, por eso nos tomamos la tarea de acercar estas comparaciones al mercado colombiano y, así, darte una idea de lo importante que es cada labor. Las labores y su costo Chef: Una de las actividades más comunes en el hogar es la cocina. El tiempo requerido entre planear, cocinar, servir y atender a la familia en la mesa. En promedio, un salario para este perfil en Colombia es de 750 mil pesos más prestaciones sociales. Aseadora y oficios varios: Labores de limpieza, lavado de ropa, planchado, etc. requieren un trabajo que, salarialmente, en Colombia se aproxima a los 700 mil pesos. Mensajería: Sin contar costos de movilización, y considerando que diariamente se realizan movilizaciones del hogar a supermercados, bancos, entre otros, la labor de mensajería de acuerdo con el mercado colombiano tendría un valor de un salario mínimo. Vigilante: Proteger el hogar, la vivienda y velar por la seguridad de todos los miembros de la familia dentro y fuera de la casa son otras de las labores que diariamente se realizan sin remuneración, principalmente por las mujeres. Este trabajo si fuera remunerado, se estima con salarios de entre 800 mil y un millón de pesos sin contar incrementos por turnos nocturnos y dominicales.

Otras labores

Aunque las aproximaciones pueden variar y dependen de las condiciones laborales y las situaciones socioeconómicas de cada lugar. Otros costos que se pueden vincular a la lista están relacionados con labores imprescindibles para los hogares y que, cada vez más, surgen como negocio y servicios de asesoría:

• Coordinación de servicios para el hogar y la familia.
• Evaluación y provisión de necesidades familiares.
• Reuniones escolares y participación en actividades.
• Crianza y educación.
• Manejo de emergencias médicas, emocionales, escolares y situacionales (incluye primeros auxilios y diagnósticos preliminares).
• Asesora espiritual.
• Administración de recursos humanos y financieros, tangibles e intangibles.
• Madre, esposa, hija, nuera, hermana, cuñada, tía, sobrina nieta, amiga, etc./ Apoyo físico, mental, emocional, amoroso, etc.

Como ves, las labores en el hogar no solo son un gran esfuerzo y muestra del amor con el que las mujeres se ocupan del hogar, sino la evidencia de las diferencias que existen entre las cargas laborales de hombre y mujeres. Así que si eres una de las mujeres que diariamente obsequia su trabajo, te felicitamos por tu gran y poco reconocida labor.